Mediante la tutoría del Profesor Jairo Molina, expresamos nuestra opinión sobre dos temas de gran trascendencia pedagógica a nivel mundial: Los siete saberes necesarios para la Educación del Futuro (Morin 1999) y la Educación encierra un tesoro (Informe Delors). Seguidamente el profesor incorporó dos temas de necesario análisis y reflexión para toda la sociedad, especialmente para quienes tienen la gran responsabilidad de educar: La familia y los maestros. Éstos temas: La violencia escolar y las Tics y Violencia en los pupitres; deberían ser de constante difusión a través de diferentes medios comunicación para contribuir a disminuir los altos índices de violencia que existen en la actualidad, debido principalmente a la falta de asesoría y orientación que existe, tanto en el hogar como en la escuela, sobre el adecuado uno de las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación.
TEMA IV: VIOLENCIA EN LOS PUPITRES
Pereira Y Misle (2009)
VIOLENCIA EN LOS PUPITRES – PASIVIDAD EN LOS ESCRITORIOS
Opinión de Carolina Arenas
Los ambientes educativos, principalmente en los niveles de básica y media deberían ser entornos escolares agradables, tanto para estudiantes como para docentes; sin embargo, actualmente resulta un poco difícil encontrar en los salones de clases armonía, cordialidad, respeto y compañerismo. La sociedad en general se encuentra imbuida en la inmediatez del mundo globalizado y ello se ve reflejado en la superficialidad con que se desenvuelve el proceso de enseñanza - aprendizaje; los factores son múltiples: la desintegración familiar, el consumismo, el materialismo, la promoción de antivalores, pero fundamentalmente el incentivo de la violencia física y verbal que desde hace varios años se viene difundiendo a través de los mass media a nivel mundial, alcanzando todos los ámbitos de la sociedad; esto se refleja fielmente en los salones de clase, pues cada uno de estos espacio es una pequeña muestra representativa de lo que acontece y se padece fuera de ellos... Dentro de ellos muchas veces generados por los mismos compañeros de clases y en algunos casos contribuye la falta de vocación, atención u orientación de los docentes.
Los ambientes educativos, principalmente en los niveles de básica y media deberían ser entornos escolares agradables, tanto para estudiantes como para docentes; sin embargo, actualmente resulta un poco difícil encontrar en los salones de clases armonía, cordialidad, respeto y compañerismo. La sociedad en general se encuentra imbuida en la inmediatez del mundo globalizado y ello se ve reflejado en la superficialidad con que se desenvuelve el proceso de enseñanza - aprendizaje; los factores son múltiples: la desintegración familiar, el consumismo, el materialismo, la promoción de antivalores, pero fundamentalmente el incentivo de la violencia física y verbal que desde hace varios años se viene difundiendo a través de los mass media a nivel mundial, alcanzando todos los ámbitos de la sociedad; esto se refleja fielmente en los salones de clase, pues cada uno de estos espacio es una pequeña muestra representativa de lo que acontece y se padece fuera de ellos... Dentro de ellos muchas veces generados por los mismos compañeros de clases y en algunos casos contribuye la falta de vocación, atención u orientación de los docentes.
En Venezuela, Cecodap, entre otras instituciones y organizaciones, tanto públicas como privadas, han estudiado durante varias décadas el tema de la violencia escolar
y resulta un poco difícil para cualquiera de ellos, incluso para nosotros, establecer una responsabilidad definida a este
hecho:
a) ¿Es culpa de la falta
de vocación de los docentes?
b) ¿Se debe a la carencia
de atención de los padres?
c) ¿Influye la
programación violenta y agresiva que se difunden a través de las Nuevas
Tecnologías de la Información y Comunicación?
¿Cuál de éstas
alternativas será la respuesta correcta? Según mi parecer, todas las anteriores.
No cabe duda que en la
agresión escolar no interviene un sólo factor, en ello tienen responsabilidad todos los
actores sociales que circundan al estudiante, esto incluye la desmedida
exposición a que los jóvenes se exponen día a día ante imágenes violentas
difundidas principalmente por las redes sociales - que en nuestro país tienen un
alto alcance en todos los niveles de nuestra sociedad - trasladando todos estos
elementos negativos a los ambientes educativos y originando principalmente entre los estudiantes envidia, odio,
acoso físico y verbal, intolerancia, competitividad, entre otros.
¿Qué hacer ante un caso de violencia?
Si la violencia es en la calle... llamar al 0800FAMILIA.
Si la violencia es en la casa... llamar también al 0800FAMILIA
Si la violencia es en la casa... llamar también al 0800FAMILIA
Si la violencia es en el salón de clases... llamar al 0800LLÁMATE... es la más gratuita de todas, pero al parecer la más difícil de realizar... en estos casos la debes atender - es para ti - para nosotros, no podemos ignorar nuestra responsabilidad ante estas circunstancias. Cada día tenemos ante nosotros la oportunidad de contribuir a formar un delincuente o un ser humano.
Ya lo dijo Savater "Como educadores solo podemos ser optimistas. Con pesimismo se puede escribir contra la educación, pero el optimismo es necesario para ejercerla. Los pesimistas pueden ser buenos domadores, pero no buenos maestros...La educación es un acto de coraje, cobardes y recelosos abstenerse...
Es imprescindible que dejemos de ser domadores de cerebros y de conductas a través de la fuerza o de la manipulación... y no empeñarnos más en imponer disciplinas que ni nosotros mismos seguimos y mucho menos damos el ejemplo... pero si realmente queremos cambiar esta situación, entonces podemos amansar el corazón de los jóvenes y el nuestro... se obtendrán mejores resultados... Sin embargo, los docentes venezolanos cada día nos tropezamos con dos realidades opuestas, a lo que los autores se refieren con la frase "Si pero No", que equivale a decir, nos contradecimos constantemente: Ignoramos las realidades, vivencias y problemas de nuestros estudiantes, pero desahogamos los nuestros con ellos, queremos que ellos sean sensibles, comprensivos, empáticos y considerados con nuestras fallas, faltas y errores pero no cedemos para entender los de ellos. Exigimos todo de los estudiantes pero damos muy poco a cambio. ¿Cuál es la utilidad de una educación así? ¿Qué requisitos hay que cumplir para que la educación en lugar de excluir se decida de una vez por todas a incluir?... pero no me refiero sólo a incluir al mayor número de jóvenes en el sistema educativo - que de por sí es de vital importancia - sino a incluir al ser humano y al conjunto de elementos que lo integran, no sólo sus capacidades cognitivas, es necesario también rescatar e incorporar sus capacidades emotivas.
Está demostrado que con mano dura - Pedagogía del castigo - no se logra estimular el aprendizaje ni la reflexión en los estudiantes; pero tampoco se logra con tanta elasticidad sin orientación, se requiere implementar la Pedagogía de la sensación, que permita mantener un equilibrio entre la realidad externa y la interna de los niños y adolescentes.
Es por ello necesario preguntarse:
¿Existe algún lindero entre la existencia física, mental y espiritual de cada persona?
Si la respuesta es negativa, entonces porqué nos empeñamos en considerar en los muchachos sólo sus capacidades mentales y nos olvidamos de incentivar las emotivas y espirituales. Debemos decidirnos a sustituir el odio, el resentimiento, la envidia, el egoísmo, la soledad y el vacío que nuestros jóvenes llevan en sus morrales y contribuir a llenarlos con respeto, responsabilidad, comprensión, solidaridad y obtendremos mejores resultados... no sólo en sus actitudes y en el promedio de notas, sino además en el promedio de satisfacción personal nuestro. Es necesario entrar a sus vivencias, conocerlos y entenderlos, luego podremos comprenderlos...esto es muy fácil ¿Cuál será el costo de esta entrada? por fortuna también es gratis... no tenemos excusas...y hay suficiente espacio disponible...Nunca el auditorio estará lleno... faltas tú y tu aporte, porque sólo podrá enseñar a ser persona, el educador que se esfuerza sin ningún esfuerzo a serlo plenamente, por crecer hacia adentro, que se reconoce como educador de por vida. No podemos olvidar que, si bien, uno explica lo que sabe o cree saber, cada uno de nosotros enseña lo que es. En las escuelas es necesario enseñar a convivir, pero ello sólo se logra si convivimos al enseñar - que nuestra clase se convierta en una vivencia permanente, en un encuentro de dos libertades: la del adulto y la del joven.
La agresión, sea ésta física, verbal o sicológica es un signo de debilidad moral e intelectual que imposibilita la convivencia social. Los docentes tenemos el deber de ser especialistas en resolver conflictos en el aula. Para ello es necesario asumir este reto y considerarlo como una oportunidad privilegiada para educar. La violencia entre los jóvenes suelen ser válvulas de escape de sus conflictos internos que deben ser analizadas con cuidado para comprender qué quieren expresar los estudiantes con su comportamiento.
De ahí la importancia de una educación que enseñe a conversar, a escuchar, a expresarse con libertad y no convertir las diferencias en desigualdades. Si dejamos de ser simples dispensadores de reglas e informaciones y comenzamos a asumir el rol de orientadores y educadores de nuestra profesión, lograremos salir de un modelo educativo autoimpuesto fundado en el éxito de los "débiles" y el fracaso de los "fuertes", debemos invertir esto y permitir que los fuertes tengan éxito en la vida pero sin violencia y los débiles no sean víctimas de otros debido a su éxito.
De ahí la importancia de una educación que enseñe a conversar, a escuchar, a expresarse con libertad y no convertir las diferencias en desigualdades. Si dejamos de ser simples dispensadores de reglas e informaciones y comenzamos a asumir el rol de orientadores y educadores de nuestra profesión, lograremos salir de un modelo educativo autoimpuesto fundado en el éxito de los "débiles" y el fracaso de los "fuertes", debemos invertir esto y permitir que los fuertes tengan éxito en la vida pero sin violencia y los débiles no sean víctimas de otros debido a su éxito.
Haz click en el siguiente video: La Violencia termina cuando la educación empieza.
En nuestra labor diaria podemos influir para que nuestros hijos y estudiantes estén de un lado del autobús o del otro... ¿De qué lado te gustaría que estuvieran los tuyos?.... Entonces entra a sus vivencias y atiende la llamada... Ya sabes es gratis, no se paga nada por intentarlo, aunque no hacerlo suele resultar muy costoso... Carola
No hay comentarios:
Publicar un comentario